sábado, 31 de diciembre de 2016

La Puntilla .- 31 de enero de 2016 - 2017


2017

Aún partiendo de la base de que todo ese asunto de los años nuevos no pasa de ser una decisión convencional, que varía según las distintas culturas, he de decir que esta vez la cifra de 2017 me gusta.

Puestos a hacer divagaciones cabalísticas se observa que la suma de los cuatro grafismos es 10, y el diez es plenitud y excelencia...

Y si se acude a la Bíblia, puede afirmarse que es año que augura buenas noticias, ya que termina en 7, número que abarca los cuatro puntos cardinales y las tres personas trinitarias...

Vaya, que quien no se esperanza es porque no quiere.

Al empezar un nuevo año, cambiamos los calendarios, renovamos las agendas, prometemos que habrá novedades en nuestras vidas (año nuevo, vida nueva) y que el peso y el paso de los años nos hará madurar... Pues que así sea.

Y sin olvidar, en este primer día, la Jornada de la paz, con un lema del que tenemos que autoconvencernos: la violencia y la paz son incompatibles en la construcción de una sociedad.

A los lectores y a los no lectores de este modesto blog os deseo un año sereno, tranquilo y sin grandes alteraciones que nos puedan arrebatar la paz.


viernes, 23 de diciembre de 2016

La Puntilla - 25 de diciembre de 2016 - NAVIDAD, UNA BUENA NOTICIA


NAVIDAD, UNA BUENA NOTICIA

Navidad es una buena noticia, y esto es de agradecer en los tiempos que corren.

En efecto, Navidad fue -y es- una noticia bien anunciada y bien comunicada.

El periodista experto (Isaías)  supo leer el futuro y afirmó: el pueblo que anda en tinieblas verá una luz muy grande 

El cronista, buen narrador, (Pablo de Tarso,) explicó a su amigo Tito que la Navidad era una buena ocasión para apostar por una vida  sobria, honrada y religiosa. 

Y los redactores de calle, (los mensajeros),  los más sacrificados y trabajadores, se fueron al campo, que es la vida, a anunciar y comunicar a los pastores, a los hombres y mujeres de buena voluntad, que era posible la paz, si la cimentábamos en los pilares del amor, el perdón, la justicia y la libertad.

Navidad es un mensaje sugerente y sugestivo para quien tenga el oído atento y la mente dispuesta. 

Navidad es luz, aunque la violencia y la venganza prefieran siempre la oscuridad.

Navidad es descubrir el valor de la austeridad y la solidaridad, frente al desatino del derroche y el consumismo inútil.

Navidad es colaborar para ir construyendo un mundo apasionado por hacer el bien...

Amigas y amigos, conocidas y conocidos, saludadas y saludados, os deseo, de todo corazón, una Navidad serena y feliz, enriquecedora de vuestro interior, y plena de nuevas esperanzas. 




viernes, 16 de diciembre de 2016

La Puntilla ´18 de desembre 2016 - PUNTOS DE REFERENCIA


PUNTOS DE REFERENCIA

La expresión punto de referencia es utilizada por diversas disciplinas científicas para indicar perspectivas o personas que permiten establecer nexos o comparaciones entre diferentes realidades.

Se dice, por ejemplo, – aquel dato es para mí un punto de referencia;  o –aquella persona ha sido - o es- mi punto de referencia...

En la vida de cada uno y de cada una ha habido, y hay, personas, unas aún vivas y presentes en nuestras vidas, y otras ya muertas, que son o han sido verdaderos puntos de referencia para vivir con más profundidad nuestra vida, nuestra acción y nuestro compromiso.

Personas, sin duda, que nos han ayudado muy positivamente en nuestro crecimiento personal y espiritual.

Dicen que Navidad es una buena ocasión para recordar a las personas que han significado algo en nuestra vida. Celebramos el nacimiento de una Persona que, para los creyentes, jugó y juega un papel muy importante en nuestras vidas;  y es una buena ocasión para recordar y agradecer también el nacimiento de tantos otros seres que han sido para nosotros una auténtica buena noticia...

Hoy se necesitan urgentemente puntos de referencia. Se necesitan profetas que abran caminos de esperanza en una sociedad tan mediocre y conformista como la que nos rodea.




viernes, 9 de diciembre de 2016

La Puntilla. SABOR A NAVIDAD - 11 de diciembre de 2016




SABOR A NAVIDAD

Un avezado publicitario, al servicio del loco afán consumista que nos invade, sobre todo estos días, ha acuñado un eslogan: – TODO LO QUE SABE A NAVIDAD ESTÁ EN EL SUPERMERCADO.xxx.

Pues no, señor publicitario.
Porque lo que sabe a Navidad està verdaderamente:

* en esa família que va a ser hoy desahuciada y desalojada de su casa porque, como les pasó a María y José, no hay lugar para ella en la posada de este mundo;

* en este pobre que seguirá durmiendo en la calle, como Jesús tuvo que nacer y dormir su primer sueño en una cueva de animales;

* en tantos padres que, como José, intuyen un futuro muy incierto para sus hijos;

* en el dolor de tantas madres que, como María, ven a diario que espadas de dolor traspasan sus almas;

*  en tantas mujeres que tienen que alumbrar sus hijos en condiciones sanitarias deplorables, como le pasó a María;

* en los explotados pastores que, como tantos otros trabajadores, tenían que pasar la noche velando el ganado para ganar un sueldo miserable;

* en esa família de refugiados que ha huido de su país, como María y José tuvieron que huir a Egipto, porque les amenazaban de muerte;

Sí, señor publicitario, en todo esto y en muchas más cosas, hay sabor a Navidad, mucho más que en los turrones del Supermercado...

viernes, 2 de diciembre de 2016

La Puntilla - 4 de diciembre de 2016 - METÁFORAS VIVAS


Metáforas vivas

El filósofo francés Paul Ricoeur /1913-2005) afirmó en una ocasión que el lenguaje religioso se había convertido en un cementerio de  metáforas vivas...
Hoy preocupa en gran manera el lenguaje religioso y, sobre todo, la cultura religiosa de los jóvenes. El lenguaje porque les resulta lejano y extraño a su manera de expresarse, y la cultura porque comienza a ser para ellos la gran desconocida. 
No puede amarse lo que se ignora, y el desconocimiento religioso comienza a ser más que alarmante.
La religión es un modo de vida y de actuar, pero esa religión ha de contar con vías de acceso que la hagan accesible a las personas.
Es cierto que la mejor vía es la ejemplaridad y el testimonio, pero, en la actual sociedad de la comunicación, no pueden ignorarse ni despreciarse las vías de la comunicación y de la historia.
El lenguaje litúrgico, por ejemplo, resulta en muchas ocasiones tan críptico y enrevesado que suena, se podría decir, a metàfora muerta.  
¿En cuántos sermones se habrá oído hablar, por ejemplo, en este tiempo de Adviento de conceptos como escatologia, salvación, retorno, brote de Jesé, o <por obra del Espíritu Santo>?
Hoy resulta urgente elaborar un lenguaje capaz de transmitir a la actual  generación la profundidad de la gran metáfora viva que es la existencia de Dios y su presencia en nuestra vida cotidiana.