sábado, 29 de enero de 2022

La Puntilla - Trabajo... 30 de enero de 2022

 

Trabajo…

La relativa buena noticia de la semana, si los datos no están algo hinchados, que todo es posible, ha sido, sin duda, que el empleo ha subido y el paro ha descendido

                Pero los números no son inertes y ese 13.3 por ciento de desempleo que todavía subsiste supone un total de 3.103.800 personas sin un puesto de trabajo, cifra que trae consigo mucho dolor y preocupación.

                Cabe afirmar, en síntesis, por lo tanto, que todavía queda mucho por hacer, y que todos tenemos en esta tarea algo que aportar.

                Fijándonos en los datos oficiales se observa que entre los nuevos ocupados hay 48.400 hombres frente a 105.500 mujeres; y que 151.300 de los nuevos ocupados son nacionales, frente solamente a 2.700 extranjeros que han conseguido un puesto de trabajo.

                Los datos nunca son puramente fríos y si se reflexiona sobre ellos aparecen unos cuantos interrogantes que no suelen tenerse en cuenta. Por ejemplo:

                ¿Se contempla que los desempleados puedan contar con algún tipo de prestación social?

                ¿Cuántos de los nuevos trabajos son eventuales y cuántos son fijos?

                ¿Las 105.500 mujeres que han obtenido nuevos trabajos cobrarán el mismo salario que si fueran hombres?

                Ante la exigua cifra de 2.700 nuevos trabajos ocupados por extranjeros ¿puede seguir manteniéndose el mito de que los extranjeros nos quitan los puestos de trabajo?

                Las noticias se han de pasar siempre por el tamiz de la reflexión y la acción. Las estadísticas no son simplemente estadísticas cuando atañen a las personas.


sábado, 22 de enero de 2022

Aprender... La Puntilla, 23 de enero de 2022

 

Aprender…

 

Desde que empezó todo este circo de la pandemia, en aquel inolvidable 14 de marzo de 2020, como fecha ya enmarcada en la historia, estamos ya próximos a cumplir dos años y no vemos todavía un claro final.

         Por otra parte, haciendo gala de nuestro pragmatismo, nos seguimos preguntando: ¿está sirviendo para algo toda esta convulsión social y moral que agita el mundo y parece no tener fin?

         Creo, honradamente, que ya somos muchos a los que nos está sucediendo un hecho contrastado: pensábamos que nos hallábamos ante una inmejorable ocasión de cambiar muchas cosas, y, sin embargo, vemos que las reticencias al cambio se imponen de diferentes maneras…

         Ni hay diagnósticos concretos, ni hay voluntad e interés en afrontar los problemas más profundos. Seguimos viviendo en una sociedad adormecida, que sueña con alcanzar paraísos inexistentes sin el precio del esfuerzo.

         Mirando a nuestro alrededor puede afirmarse que, pese a que el virus ha agitado algunas cosas, se está imponiendo un reiterado afán de volver a las peores rutinas de siempre.

         Las grandes transformaciones sociales sólo se logran mediante el trabajo y el esfuerzo, y una catástrofe sanitaria, por muy profunda que haya sido, poco puede hacer por sí sola, si no cuenta con el apoyo de una acción social crítica y constructiva, de la mano de personas libres y comprometidas.

         No perdamos la esperanza de que nazca algo nuevo.

        


viernes, 14 de enero de 2022

Cosas... La Puntilla, 16 de enero de 2022

 


Cosas…

       Escribía hace poco la brillante escritora Irene Vallejo que nuestras casas están cada vez más repletas de cosas…y no le falta razón.

         La sociedad de consumo ha ido provocando que cada vez sean más abundantes en los hogares los objetos, la mayoría de ellos inútiles, que van llenando estanterías…

         Y esta ostentación es una muestra más de una sociedad injusta y discriminativa que se permite el gasto inútil y caprichoso, cuando son millones los seres que no tienen siquiera recursos para llevarse a la boca una comida diaria.

         Estamos, ciertamente, en la cultura del deshecho y el desperdicio, pero lo que más asusta es comprobar que lo que acaba en la basura no son solamente esos objetos de los que ya nos hemos cansado, sino también comida y otros enseres que podrían paliar el hambre y la miseria de muchos.

         La visión, esta misma semana, de un grupo de emigrantes africanos desplazados de sus precarias viviendas y pasando una fría noche tirados en una plaza de Badalona es absolutamente indignante y muestra una vez más la insensibilidad de quienes tienen que tomar decisiones… ¿No se pueden hacer las cosas de otra manera?

         O nos ponemos un poco las pilas para mejorar nuestra atención al ser humano, o esta creciente pandemia de anti-humanismo será mucho más grave que las pandemias víricas…  

         Son ya demasiadas cosas en las que estamos tocando fondo…

        


viernes, 7 de enero de 2022

Saber... La Puntilla, 9 de enero de 2022

 

Saber…

Un conocido programa radiofónico lleva el expresivo título de nadie sabe nada, y creo que estas palabras pueden aplicarse con mucha exactitud a la situación con que ha comenzado el año 2022…

Porque da la sensación de que ante hechos muy graves que están sucediendo, quienes debieran, al menos, orientar a los ciudadanos, mantienen un silencio sospechoso: o no saben reaccionar, o no quieren…

Pensemos, por ejemplo, en unos cuantos hechos:

–¿comenzarán las clases infantiles, juveniles y universitarias con normalidad? ¿Qué generaciones estamos alumbrando…?

–cuándo cesaran, o al menos serán perseguidos, los pingües negocios que están realizando algunos individuos e instituciones a costa del maldito coronavirus…?

–¿por qué están disminuyendo progresivamente todos los servicios públicos, sobre todo en los ámbitos de los Servicios sociales y la salud pública?

–¿algún gobierno estatal o local tendrá siquiera una mirada hacia los países del tercer mundo, destinando algún dinero de los presupuestos a proyectos de solidaridad? ¿Qué se ha hecho del famoso 0,7 por ciento para luchar contra la pobreza en el mundo?

–cuáles son, en realidad, los factores que han disparado el precio de los alimentos, la luz y el gas? ¿Cuánto hay de ambición y manipulación entre los gestores públicos?

2022 ha comenzado con muchas incertidumbres y nos gustaría que los medios de comunicación, sobre todo, más allá de entretenimientos digitales, nos ayudarán a saber un poco más sobre la situación real de nuestra sociedad y los planes de futuro.

 


sábado, 1 de enero de 2022

Año nuevo La Puntilla 1 de enero de 2022 (en la anterior había un error...)

 

Año nuevo…

 

El estado pandémico que estamos viviendo ha hecho que este año los medios digitales hayan estado, si cabe, mucho más utilizados para desearnos poder salir de los desahuciados 2020 y 2021 y entrar con buenos ojos en el 2022…

Una mirada al móvil, al facebook, al twitter o al instagram, nos presenta un amplio ventanal de propuestas e iniciativas comunicativas para desearnos toda clase de parabienes ante la perspectiva de un nuevo inicio de año.

No cabe duda, por otra parte, que este hecho ha provocado que se haya perdido, por ejemplo, la comunicación más directa con las personas, aunque se haya ganado en imaginación y creatividad…

En mi caso, como en el muchas otras personas, el alud ha sido bastante abundante y ojalá que los buenos deseos expresados se vayan cumpliendo y los caminos de mi ochenta y tres aniversario sean mejores que los anteriores…

Mi deseo, por otra parte, se ha visto bastante confortado en las palabras del inefable Quijote donde pueden leerse estas palabras: Sábete, Sancho, que todas estas borrascas que nos suceden son señales de que presto ha de serenar el tiempo y han de sucedernos bien las cosas; porque no es posible que el mal ni el bien sean durables, y de aquí se sigue que, habiendo durado mucho el mal, el bien esté ya cerca…

Pues, feliz año nuevo…