sábado, 15 de junio de 2019

El interior bien amueblado - La Puntilla, 16 de junio de 2019


El interior bien amueblado

Tal vez por influencia sinaítica hay personas a las que les encanta elaborar decálogos sobre las más variadas cuestiones... 

Escribo esto porque recuerdo que en una ocasión leí un Decálogo para un interior bien amueblado; y como el tema me interesaba me dediqué a hacer una pequeña glosa de lo que allí se me ofrecía... 

Y este es el tema que os presento hoy.

¿Cuándo se puede decir que nuestro interior, es decir, la voluntad que decide nuestras acciones, está bien dotado de aquellos elementos que lo hacen fuerte y equilibrado?

Yo me quedo con cinco características que considero fundamentales:

– una vida emocional debidamente jerarquizada y controlada
– fortaleza ante las tensiones, dificultades e imprevistos
– aceptación de los propias limitaciones y defectos
– gran amor por la belleza y la bondad en toda la extensión de los dos términos
– siempre abiertos a recibir y generosos en dar
– respeto por la pluralidad ideológica y conductual
- fidelidad al compromiso y a la palabra otorgada

Observo que me han salido siete propuestas...También el 7 es muy bíblico, y dicen que es la plenitud...

Es igual 10 que 7. El que cuenta es que el interior goce de buen estado de salud, porque es del interior de las personas de donde sale todo: lo bueno y lo malo...

De vez en cuando conviene observar la buena salud de los muebles...

sábado, 8 de junio de 2019

La condición humana - La Puntilla, 16 de junio de 2019


LA CONDICIÓN HUMANA

Conozco personas que ante determinadas situaciones tensas y a veces violentas que se producen entre los seres humanos suelen decir: «-es la condición humana».

Aclaremos un poco esta expresión.

El término no es nuevo, aunque han sido, sobre todo recientemente, muchos y variados los autores que han intentado definirlo.

Resumiendo, puede decirse que este concepto viene determinado por la serie de acontecimientos biológicos que son comunes a la mayoría de las vidas humanas y por la manera en que solemos reaccionar los humanos frente a los distintos acontecimientos que nos presenta la vida.

De hecho, distintas religiones y filosofías intentan dar significado a esta condición humana.

Más llanamente podríamos decir que la condición humana viene determinada por la tensión que existe entre la parte corporal y la parte espiritual de la persona humana. Indica las diferentes formas de vivir  y el por qué de todas ellas.

Y está claro que esta condición humana viene determinada por la educación recibida y por el entorno cultural, económico, social, político y jurídico en que cada individuo desarrolla su vida; pero no es menos cierto que somos seres que podemos elegir y que gozamos de una libertad psicológica, que se puede verse condicionada, obstruida y limitada, pero no anulada...

Pascal afirmaba que toda nuestra dignidad está en nuestro pensamiento... Y también en nuestra sensibilidad estética, en nuestra capacidad de emoción, y en nuestra capacidad de comunicación y de diálogo..

La condición humana es ser portadores de una serie de valores morales que podemos desarrollar para conseguir una sociedad donde la ètica, el bien, la bondad y la felicidad sean una realidad.

Es cierto que a lo largo de la filosofía nos hemos movido entre el homo homini lupus («el hombre es un lobo para el hombre») de Hobbes;  y el «el hombre es cosa sagrada para el hombre», de Séneca. En estos dos paradigmas se centran la historia y la cultura política, y en ellas se van configurando las luces y las sombras de nuestra convivencia y los talantes de las personas. Nadie es puro, nadie es perfecto... Esta es, en definitiva, la verdadera condición humana...



sábado, 1 de junio de 2019

HABLEMOS DE CULTURA - La Puntilla - 2 de junio de 2019


HABLEMOS DE CULTURA

Me interpela una lectora de este blog: –usted habla con frecuencia de falta de cultura...Y me gustaría saber qué quiere decir exactamente cuando habla de cultura...

Y naturalmente, una primera y fácil salida es acudir al Diccionario de la Lengua. Lo decía con mucho acierto Garaudy: antes de hablar hay que definir las palabras...

Pues bien, el diccionario nos dice: cultura es un conjunto de conocimientos que permite a alguien desarrollar un juicio crítico...

Ya  tenemos una pista, y podemos convertirla en una afirmación: la frecuente carencia de juicios críticos es debida a la falta de conocimientos por parte de quien los emite...

Pero aquí tenemos que entrar en una clarificación de qué se entiende por conocimientos...
Y volvemos al diccionario: entendimiento, inteligencia, razón natural, noción, saber, o noticia elemental de algo... Hay para escoger, pero una cosa es común: el conocimiento es el ejercicio de entender, saber, o ejercer la inteligencia y la razón natural...

 La  UNESCO nos dice que la cultura es el conjunto de rasgos distintivos, espirituales, materiales, intelectuales y afectivos que caracterizan a una sociedad o a un grupo social...

Y no quiero divagar más. Se me ha hecho una pregunta y respondo:

– Habl con frecuencia de falta de cultura porque:

– porque observo demasiada gente que habla de lo que no sabe...

– porque en mi concepto de cultura entran una serie de valores que no veo que abunden, como son, entre otros, el respeto a las opiniones de los demás, el juicio crítico y el máximo respeto a la verdad

– y porque la cultura me merece tanto respeto que no puedo verla manipulada por intereses puramente económicos y de poder político...

Y dejémoslo así...