Huellas…
Entre mis
papeles he encontrado hoy unas notas que quisiera evocar en esta Puntilla.
Daba
una charla a un grupo de padres de una escuela y compartí con ellos unas
palabras de la Madre Teresa de Calcuta: enseñarás a volar, pero no volarán
tu vuelo; enseñarás a soñar, pero no soñarán tu sueño; enseñarás a vivir, pero
no vivirán tu vida. Sin embargo, en cada vuelo, en cada sueño y en cada vida
perdurará siempre la huella del camino enseñado.
Y me
acuerdo que este texto dio mucho de sí en un animado coloquio.
Hoy
se dice que nuestra sociedad necesita líderes, maestros, médicos y poetas, y es
cierto, pero yo opino que por encima de todo hoy son imprescindibles las
personas que con su testimonio alienten y entusiasmen las nuevas generaciones.
Se
escribe mucho, y casi siempre en sentido negativo, sobre la generación más
joven, pero en estos análisis suelen existir algunos errores bastante
manifiestos por no considerar que:
–por
una parte, el mundo ha cambiado mucho; y de la modernidad hemos pasado a
la postmodernidad; de la máquina de escribir y el teléfono al boom
imparable de las nuevas tecnologías; de una Iglesia en éxodo, a una Iglesia en
exilio; de una libertad controlada a un liberalismo desenfrenado…;
–pero,
por otra parte, no se puede caer en la trampa de pensar que los testimonios de
generosidad, la entrega a la causa de los débiles, las actitudes de tantas y
tantas personas solidarias y entregadas ya no tienen valor, ni causan ningún
efecto.
No
hay ninguna acción positiva que no deje huella en la vida de alguien. Los
chinos suelen decir que si tenemos solamente dos monedas, gastemos una en pan y
la otra en flores, es decir, en acciones que generen belleza…
Hola Manel, me gustaría escribirte para preguntarte algo sobre el libro de la parroquia de Santa Maria de Sales, puedes darme un correo? Saludos,
ResponderEliminarMarc