AMANDA - La Puntilla - 24 de enero de 2021

 AMANDA

Mirar la realidad a la búsqueda de noticias esperanzadoras proporciona, en ocasiones, alguna que otra satisfacción; y estos días Amanda Gorman, una poetisa y activista norteamericana de 22 años y de raza negra, ha devuelto la ilusión al mundo con su  discurso en la toma de posesión del nuevo presidente de los Estados Unidos.

Subrayaré, en efecto, algunas de sus afirmaciones, porque son dignas de ser reflexionadas y aplicables a nuestra propia situación personal y colectiva.

Amanda comenzó su discurso con una pregunta: ¿Dónde podremos encontrar la luz en esta sombra interminable? Y siguió diciendo: Hemos aprendido que el silencio no siempre es paz y que en las normas y nociones de lo que « es justo » no siempre hay justicia...Hemos sido testigos de una nación que no está rota, sino simplemente inacabada...

Y al seguir atentamente la intervención de esta muchacha, y no solamente de lo que dijo, sino de cómo lo dijo, con una brillante ilusión en sus gestos y en su mirada, podemos reafirmarnos todavía más en el valor de este discurso: 

Levantamos nuestra mirada no a lo que se interpone entre nosotros, sino a lo que está frente a nosotros, y para priorizar nuestro futuro primero debemos dejar a una lado nuestras diferencias... Bajamos las armas para estirar los brazos hacia el otro. No buscamos daño para nadie y sí armonía para todos... Si queremos estar a la altura de nuestro tiempo entonces la victoria no estará en la espada, sino en todos los puentes que hayamos construido...

Y me quedo y os ofrezco el párrafo final, profundamente esperanzador: La democracia puede retrasarse periódicamente, pero nunca puede ser destruida de forma permanente... Si fusionamos la misericordia con el poder y el poder con los derechos, entonces el amor se convierte en legado... Dejemos un país mejor que el que nos dejaron... Siempre hay luz si tenemos el valor de verla...

El discurso me ha parecido tan magnifico como aquel sueño de Luther King, que también era negro, y que tanta influencia tuvo en la vida de su país. Y es que los pueblos siguen necesitando poetas comprometidos y soñadores de utopías...