La
sociedad del vacío...
Lo
diagnostican los sociólogos: hoy vivimos la sociedad del vacío…
Cabe decir, en primer lugar, que hoy hay
una clara confrontación y fractura entre dos culturas, o maneras de entender la
vida; y es en esta confrontación donde aparece más profundamente la realidad
del vacío…
Unos manifiestan un fuerte deseo de
volver al pasado, donde creen sentirse seguros; y otros se instalan de manera
poco crítica y superficial en una nueva cultura propia de la denominada
modernidad o postmodernidad…
Son ya muchas las personas que se han
cansado de luchar y han entrado en la pasividad, la despreocupación y la
tentación de relativizarlo todo. Y son también otras muchas las que deambulan
en la perplejidad, la impotencia y la total indiferencia hacia todo.
La realidad no es muy halagüeña y cabe
encontrar soluciones.
Los vacíos se llenan, entre otras
maneras, mediante la reflexión, el diálogo y la lectura.
Ortega y Gasset afirmaba que la gran
tentación de muchas personas es erigirse en búfalos heridos y limitarse a
bramar… Hoy se brama demasiado y se piensa y dialoga poco.
Ahora se avecina una campaña electoral
y asistiremos, una vez más, a una muestra muy elocuente de que son demasiados
los vacíos sociales, culturales y políticos que es preciso llenar de contenido…
Estamos frente a una buena ocasión.
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